Literalmente confluencia fangosa, Kuala Lumpur fue fundada a mediados del siglo XIX tras la apertura de una mina de estaño en el actual estado malayo de Selangor. Su población creció rápidamente y fue designada capital de Selangor apenas tres décadas después, pasando a convertirse en capital de la Federación Malaya cuando ésta se constituyó a finales del mencionado siglo. Actualmente en su skyline pueden verse más de una decena de rascacielos con una altura que supera los doscientos metros. Además de las archifamosas Torres Petronas, entre los edificios más emblemáticos de la ciudad se encuentran la torre de telecomunicaciones, conocida como Torre Kuala Lumpur, que con sus 420 metros es la cuarta más alta del mundo; la Torre Maxis, de 212 metros, situada en el distrito de negocios y con una forma realmente peculiar; la Torre Imperio, impresionante rascacielos de forma rectangular y 238 metros de altura; la Torre Telecom, situada en las afueras y el tercer edificio más alto de la ciudad con sus 310 metros de altura; y la Torre Maybank, el primer rascacielos que se construyó en Kuala Lumpur y que con sus 244 metros no tiene nada que envidiar al resto. Otros puntos de interés son la plaza Merdeka, el palacio Nacional, la mezquita Negara y la mezquita Jamek, la más antigua de la ciudad.