De origen posiblemente musulmán, la población de Letur se desarrolló en torno a un castillo, hoy día completamente desaparecido. Sí queda alguna traza de la muralla que debería rodear al menos parte de su perímetro, entre ellas una puerta que todavía da acceso al interior de la localidad. Considerada el mejor trazado medieval árabe en la provincia de Albacete, aún se respira en lugares como la calle Albayacín un intenso aroma a tiempos pasados. Situada sobre un risco en las estribaciones de la sierra de Segura, destaca por sus miradores y la abundancia de agua, que se pone de manifiesto en diversas fuentes, alguna que otra cascada y una magnífica piscina natural. Entre sus construcciones hay que mencionar el Ayuntamiento, de aspecto renacentista, y la iglesia de la Asunción, templo gótico de finales del siglo XV.