Ubicado en la parte interior de la denominada caldera de Tejeda, el monumento natural conocido como Roque Nublo se eleva justamente en el mismo centro geográfico de Gran Canaria. Se trata de una roca volcánica de unos ochenta metros de altura, situada en una zona montañosa a más de mil ochocientos metros sobre el nivel del mar y junto a la que se encuentra otra, de tamaño visiblemente inferior, que los locales conocen como La Rana. Existen evidencias de que en la antigüedad los aborígenes lo consideraban un lugar sagrado y hoy día es seguramente el sitio más emblemático de la isla grancanaria.