Ubicado sobre un cerro que se eleva unos doscientos metros justo al borde del mar, Fort Charlotte ofrece espléndidas vistas al visitante. Fue construido por los británicos a comienzos del siglo XIX, para defender la población de Kingstown de ataques llegados por mar y, especialmente, desde dentro de la isla de San Vicente. Ésta es la razón por la que la mayoría de sus cañones apuntan hacia el interior, pues los indios caribes solían atacar desde allí. Su denominación refiere a Charlotte of Mecklenburg-Strelitz, esposa del rey Jorge III. Tras caer en desuso fue usado como hospital, refugio para leprosos y también como prisión, hasta que cerró definitivamente hace un par de años. La panorámica desde arriba es espectacular, llegándose a divisar toda la capital del estado, algunas de las Granadinas y, en días claros, hasta la vecina Granada.