Continuando en viaje de retorno hacia nuestro sur europeo, esta gran Alemania siempre da mucho más de sí, como para mostrar al viajero que los busque, sus muchos y sorprendentes atractivos culturales y naturales.

Cerca de Kassel se encuentra un muy sorprendente parque, que durante muchos años fue considerado como uno de los más grandes de Europa. Se trata del Bergpark Wilhelmshöhe, un lugar hecho por ilusionado, pero también exagerado soberano alemán, que quiso para sí unos jardines de ensueño con bosques, cascadas, fuentes e incluso una gran estatua de Hércules que coronase toda su obra y sirviera de cuasi catedralicia construcción con unas dimensiones también cuasi sobrenaturales.

Aunque os acompaño unas cuantas fotos, por favor buscad, como os comento otras veces, mejores imágenes o vídeos en Google y sobre todo de sus muy asombrosos juegos de agua. Impactante y sorprendente hasta su hoy proceso de restauración y mantenimiento el cual se estaba llevando a cabo con grandes grúas y numerosos operarios. En la parte baja, como no, sobrio pero impactante alemán Schloss (Palacio), hoy convertido en museo, y cercano hotel de lujo con decoración acorde al sitio donde se encuentra.