Excepcional obra de arte rococó, la iglesia de Wies fue construida a mediados del siglo XVIII para albergar una talla de Cristo flagelado de la que una campesina aseguraba haber visto brotar lágrimas. Obra de los hermanos Zimmermann, se caracteriza por el efecto trompe-l’oeil con el que está decorada su cúpula, que la dota de profundidad escénica. En cada uno de sus puntos cardinales se sitúa una figura de los más grandes teólogos de Occidente, destacando entre ellas la que representa a San Jerónimo. Destinada a ser demolida en la secularización que sufrió Baviera a comienzos del siglo XIX, se salvó gracias a la oposición de los campesinos de la zona y hoy día está protegida como parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
La verdad es que en un entorno tan campestre y tras una fachada bastante austera no te esperas encontrar tanta belleza.
Un abrazo
Ese entorno casi bucólico que rodea al templo es uno más de sus atractivos, en mi opinión. Y la explosión de luz y color que espera al visitante cuando franquea la puerta de entrada es casi inimaginable. Precioso lugar.
Un abrazo.
Estuvimos este verano por la zona de Baviera y el Tirol. No conocía la existencia de esta preciosa iglesia.
Un saludo Belén y Ramón
Forma parte de la Ruta Romántica, aunque está algo apartada de las principales poblaciones de la misma. Si volvéis por la zona no dudéis en visitarla, merece la pena.
Muchas gracias por vuestra aportación.