En pleno Parque Regional El Valle y Carrascoy, cerca de la pedanía murciana de La Alberca, el Santuario de la Luz es uno de los escasos lugares de culto íberos que ha llegado hasta nuestros días. Al parecer, este lugar ya era venerado desde aproximadamente el siglo V a.C. y posteriormente, ya en época romana, se construyó un templo dedicado a Deméter, diosa íbera de la fertilidad. Estaba situado éste en la parte más alta de un cerro y se accedía a él mediante un dromos, sendero tallado en la roca que atravesaba diversas terrazas donde se situarían altares dedicados a otras divinidades. Junto al templo se encuentra una especie de bañera, que seguramente estaría destinada a rituales de purificación. En las excavaciones efectuadas en el sitio arqueológico se han hallado numerosos exvotos, así como una cabeza de la diosa Deméter, que se conservan en el Museo Arqueológico de Murcia.